El idioma de mis dedos
es tan libre como el viento,
cuando llevo el sentimiento,
para escribir sin enredos
en tu cuerpo tan sediento.
El lenguaje de tus brazos
en mi piel luz rimará,
y con calor pintará
melaza ,enhebrando lazos,
que a tu cuerpo me atará.
El fuego de tu mirada
hilvanará los mensajes.
Yo, con destellos salvajes,
daré besos embriagada,
quedando como tatuajes.
El idioma de este encuentro
será cual canto del río
endulzando al mar bravío .
Del universo son centro,
dulzores con sol de estío.