Solo y triste,
observo las aves
que se repliegan
y vuelan
de un lado
a otro, como dibujando
el signo
del infinito
en el espacio aéreo
y cerrando los ojos
me sumo a ellos,
que me elevan
con sus alegres cánticos;
entonces,
me sucede algo mágico,
puedo entender a los
sabios pájaros,
que sin recurrir
a palabras o bellos versos,
me hacen deducir
...que nadie está solo
en el universo.
Adolfo César (NAZARENO)