PARA TI MARÍA QUE ERES
UN LINDO AMANECER.
I
Insípido será aquél beso
que no me diese tu boca,
y me siento lleno de embeleso
si son tus labios quien me toca.
Sabes muñeca que por eso
aún sin estar mi sueño te evoca
y me siento el más feliz preso
cuando tu cuerpo al mío choca.
tienes como uvas los racimos
de besos pendiendo a placer
y gustoso desde que nos vimos
voy a hacerlos para mi, nacer
y sentir cómo ávidos los reñimos
de pasión cuando eres mi mujer.
II
Ya viene llegando ella
y trae consigo la alegría,
de mi cielo es la estrella,
quien hace que sonría.
Paz y tranquilidad destella
aún si entre una jauría
de besos que en querella
cual pirañas me devoraría.
Alado es el tiempo bendito
que con su presencia llega
y el que para si, suscito.
Sólo su amor me anega
es mi felicidad y el mito
que a lo real y triste cega.