Mujer, brisa alegre y multicolor
que con roce suave
acaricias mi barca en altamar.
Mano extendida que anhela mi ser
para caminar junto a ti
y no separarme jamás.
Corazón sangrante, cual bella flor,
donde una gota de tu sangre
pende debajo de mi corazón.
Flor de cerezo
que floreciente en la primavera
desnuda mi invierno y decora la vida
de nubes rosadas y llenas de pasión.
Sol naciente que impide
a las nubes borrascosas
adueñarse del día.
Eres, mujer de algarabía,
el verde prado donde reposa el amor
y matizado en oro
brilla en todo su esplendor.