mi soledad
no es el silencio total
ni el vacío absoluto
mi dulce soledad
es el eco de mil voces que quise
son imágenes de bellos lugares que anduve
mi soledad
es aquella caricia eterna a quien amé
mi soledad
es la sonrisa de felicidad
por cada alegría de mi hijo...
son aquellos rostros sinceros
de alumnos extraordinarios
y amigos eternos
mi soledad
es tu presencia ausente
que quedó impregnada en mi cuarto
en mis sábanas, en mi ropa
es el calor que permanece tibio
de tus brazos en los míos
mi soledad es también
la paz de mi alma...
es mi vida, disfrutando
de aquella melodía de Vivaldi, de Mozart
y también
mi soledad
es aquella triste mirada
en el último encuentro
de nuestro adiós definitivo....
de Victor
para tí...