Su ausencia me devora
¡Mi amor!
¿Cómo no he de recordarte tanto,
si en mis penas y aflicciones
siempre me hiciste compañía?
Mi tormento lo convertías en alegría,
me llenabas de nuevas sensaciones
virtuosa doncella del encanto…
Solías siempre…
estar a la misma hora
desafiando al mundo entero
en mi cuarto,
juntos esperábamos la aurora
en un éxtasis… casi de infarto;
¿Sabes?..
Tu manera de ver las cosas
irradiaban paz y luz a mis días,
¡Solíamos cabalgar,
entre pétalos de rosas!
Eran como aquellas fantasías
que se deslizan,
entre las más finas sinfonías…
Pero el tiempo encontró su medida
separándote de mi alma que te adora,
¡Tiempo!..
¿Cómo te llevaste a la más querida?
Hoy…
Su ausencia me devora.
(victolman)