Joven de sueños fallidos,
que en coraje irrumpes la fiesta
y desatas la ternura
que nunca has tenido en tu palomar.
Invisible apareces con la magia de tu bondad
y en medio de la tonada desafinada de esta vida,
que equivocadamente toca sin tocar.
Joven olvidado por una sociedad,
que como agua hedionda te ve correr,
con ese frío escalofriante de no sentirte,
de no verte en su sobrevivencia absurda y desleal
con un corazón endurecido como piedra.
Joven que en tu sueño de riqueza
te vistes de violeta en tu pobreza
y buscas sobrevivir en una humanidad
que suculenta te aparta.
Joven de sueños fallidos...