El día era bello mientras tu sonrisa iluminaba mi sol,
tus ojos brillaban y hacían resplandecer mi ilusión,
no quise cerrar mis ojos y mis oídos no tape,
mi corazón era fuego y piel,
pero tu voz ya no era fiel, tu cuerpo, tu ser,
y rompiste mi alma tal vez sin querer,
quise llorar pero lágrimas no me quedaban
quise gritar pero mi voz se esfumo
quise detenerte pero contra la luz viajabas y no te alcance,
ya no eres mío como el aire que respiro,
ya no eres mío como mi sol,
mi ilusión se atardece y la noche llega a mi corazón,
ya no eres mío,
como quisiera tenerte, sin presión
sólo dando tu aire como mi voz en una canción.