L a magia
De nuestro amor
Quedo, para siempre
Sellada.
Recuerdo que allá en el campo
Nos juramos
Amor eterno.
Y en un libro de magia
Que leímos, aquel día.
Que haciendo dos crinejas
Con bejuco de cundeamor.
Amarráramos una piedra
Dos sandalias, la tuya y la mía
Y la lanzáramos a las aguas
De aquel rio.
Y dijéramos, las palabras
De nuestro amor eterno.
Ni la muerte
Ni el tiempo
A nuestro amor
Nada lo acabaría.
Fuimos felices los dos
Hasta que llego la muerte
Separándonos para siempre.
Y ahora que te has ido
Me acuerdo
De aquella magia
Que lanzamos en el rio.
Que ni la muerte
Ni el tiempo
A nuestro amor
Nada lo acabaría.
Ahora, espero yo
Que la muerte
Venga a buscarme,
Para completar la magia
Que lanzamos
En el rio.