A Sandino
Mi sombrero es la aureola
que nunca tendré
es mi corona sin espinas
cuyo peso no me duele
su ala es mi libertad
abierta sobre la frente estéril
palomita herida en rosas abiertas
Mi sombrero me ha despojado
hasta hallarme cubierto
de los miles de muertos
que perdieron el suyo
de mis campesinos trajinados
de mis paisanos de manos terrenales.
Hubo un poeta que dijo
que su sombrero le dolía
a mí el mío me consuela
porque cubre mis penas
como cubren al universo
las estrellas desnudas del alba.