¿Se supone que somos dos amantes
Amándonos en la noche?; pero,
¿Qué somos de día?,
¿Solo unos desconocidos que deambulan
Entre cadáveres que no aman?
OH, mi amado, sin prisa te he querido,
Con pausa te he amado, y aún te sigo esperando,
Que largo horario me espera para llegar la noche
Y volver a besar tus labios, y volver a tenerte cerca de mí.
¿Por qué? ¿Por qué debemos esperar la noche para vernos?,
Si la flor se alimenta con el sol,
¿No crees que sería igual nuestro amor?
Que injusta vida vivimos; separados el uno del otro,
Queriendo estar juntos, y de forma increíble logrando
Sobrevivir.
Cruel destino el que nos ha tocado,
Sentir esto que nos une y vivir en una sociedad
Que nos diluye entre su regazo,
¿Por qué tuve que amar así?, no lo se, pero me gusta.
Dime que nunca me dejaras, dime que soy tu vida
Y seguiré amándote con vida noctámbula,
Aunque de día me duela y sienta nudos en mi alma;
Así te seguiré viviendo, por que te amo.
Duermo en el día para estar despierta en las noches,
Y cuando te vas, mi vida se va contigo e intento
No hacer demasiado ruido, pues mis padres creen que duermo,
Aunque mis ojeras y el sueño me delaten frente a ellos.
Hoy como de costumbre te espero; pero antes,
Te escribo esta carta para cuando nos encontremos,
Hagamos el amor como nunca nadie lo ha hecho
Y hagamos de este infierno una sucursal del cielo.
Atentamente, quien te ama con pasión y ternura.
JULIETA.