Que importa la fecha de hoy,
Y la ruinas de su prisa demolida,
Las cutre figuras, que preguntan la memoria,
Aguardando tardes de domingo como estas,
Grises y sin nada, solas a la sombra, de soles y los viudos arboles,
Que reposan frente a una hoja vacía y un lejano esfero,
Los reglones por llenar del vacío,
Y los silencios de tardes como estas de domingo,
Que importa al caudal del tinte derramado en la escritura,
Si fatua se desvela la ironía,
Y las palabras solo trascienden al mar, y la desidia,
Si desnuda, esta tarde, no me importa,
Ni en qué día estamos,
Si en un mes allende,
O en una lejana muda,
Esperando paciente, por fin una tarde alegre o de amargura.
Que importa la savia la derramada en horizonte,
Cuando eres un hombre sin nombre,
Con soledad, cargada al lomo, y al pudrir de corazones,
Que importa la vida cuando al lado,
Ves morir y aumentar un numero en la estadística,
te sientes tan poco al ver tras la pantalla,
la realidad ufana y no poder hacer nada,
pero es cuando nos damos cuanta, que tenemos armas,
la mas grande, las palabras.