Parece mar el cielo que he dibujado
para pensarte, lleno de ansias, de nubes
que guardan la forma perfecta de amarte,
que sigue la mirada de ave,
que caza horizontes
y estrellas, también el suspiro que es viento
y el aroma con el que busco bañarte.
Al universo lo hago mío,
desde que decidí adorarte,
lo lleno de mariposas de todos colores
y desvisto de su negro a la noche
para mirarla desnuda y vestirla de amor
como contigo lo hice.
No sé si ser ola o ser nube,
para abrirte de nuevo a la ternura,
o ser lucero que se adentre
a donde duermes para besarte
con dulzura.
Este universo es tan solemne y callado
que incluso se escucha el silencio
corriendo disfrazado como viento,
pero es tuyo, porque por ti lo he dibujado,
con huellas del profundo amor que te tengo
y los sueños que al dormir he configurado,
para que seas feliz conmigo o sin mí,
como desde nacer lo has deseado.
Saliéndonos del tiempo y su itinerario,
surquemos otros tantos universos,
seamos parte del cielo como erario
y encontremos el amor con delirio
siendo dos seres con un corazón enamorado.