¡Llueve cielo, ruge y truena
Desata de tu ira el poderío…
Que mi alma aguantara serena
De tu furia fatal el desafío.
¡Que tu rayo infernal alumbre intenso
Poderoso y letal el mundo entero,
Y al sentir del pavor horror inmenso,
Pregunte el hombre,
Porque, porque me muero?
Yo sé que nací para morirme,
E impasible espero este momento
La muerte es calmar el sufrimiento…
La muerte es la vida y la vida es el misterio.
Por eso en esas noches en que retumba el trueno
Deambulo entre la bruma y medito en tu silencio,
Por tus umbrales vago perdiéndome en el tiempo
Y a tus recintos llego, buscando tu consuelo.