Cierto día repasando tus palabras,
Y recordando lo que has dicho,
Me acordé de tu falta de sueño,
Es decir,pensé acerca del insomnio,
Me concentré en no hallar culpables,
Me centré en lo que tu piensas,
Me centré en aquello que no sé,
Pensé en lo relativo del tiempo,
Que sin darnos cuenta se aleja
Y que también a veces se queda,
Divague entre miles de sueños,
Sueños rotos,sueños cumplidos,
Sueños vueltos crueles pesadillas,
Pensé en tus varias preocupaciones,
Aquellas que también sé que ignoro,
(Así como un gran número de cosas)
las que son problemas para dormir,
Yo recaigo en la enorme ignorancia,
Esa ignorancia de la que soy presa,
Y que me vuelve frágil, dominable,
Que me vuelve en extremo insensato,
Incapaz para darte apoyo, un consejo,
Y sin embargo aún así me atrevo,
Sin esperar lo tomes muy en cuenta,
Sin esperar siquiera lo agradezcas,
Es más sin esperar que esto leas,
Yo,te aconsejo, ante tu insomnio,
No luches...
siempre y cuando sea razonable,
Es decir, algo(guien) lo merezca
Y para que \"algo\" sea merecedor,
Deberá ser aquello que amas hacer,
Puesto que lo que más repudias,
No debe tener ese espacio tan valioso,
El espacio que ocupa tu descanso,
El espacio que merece tu relajación
Y así como con el \"algo\" el \"alguien\"
Deberá ser igual de precioso para ti,
Deberá ser tan fuerte su recuerdo,
Que te abra los ojos,para no verlo,
Puesto que nadie más merece tu velo,
Nadie más que quien tenga de ti,
Nadie que no tenga parte de tu corazón,
Nada ni nadie debería desvelarte,
Nada ni nadie, además del amor.