Sólo al final
mis manos no hacen nada
solo te espero
como si no supiera tu nombre
y no estuvieras en mi historia
como si nada hubiera sido
como si el tiempo hubiera quedado en mis brazos.
Sólo al final
eres más fuerte que la muerte y que la vida,
que nace y muere siempre donde empiezas,
es seguirte sin preocuparme, como se siente
más claro y más seguro,
tratar de explicarlo es duro oficio,
por eso no lo digo.