Araceli Vellber

Lampedusa primavera 2026.

 

No espero nada.

No espero, que la mar,

Devuelva, sus muertos,

Ni el tiempo, mis besos,

Tampoco, el viento mis sueños,

Menos aún, el eco, de los ahogados en silencio.

Por no recordar, no recuerdo,

Si estaba, dormido o despierto,                                   

Cuando sentí, aquel olor a muerto                                                  

Y ese montón, de cuerpos,

Desordenados, en el espacio,

Pero en perfecto orden, en silencio.

No espero nada.

Espero sólo, tener aletas y branquias,

Para nadar en los mares, inundados de vuestras lágrimas

Y luchar contra las políticas,

Que no necesitan pateras,

Para acudir a sus conferencias.