DECISIÓN
Si yo decidiera morir después de hoy
le diría a los árboles que me hicieran
un coro de hojas secas,
para que el sonido llegue hasta los pájaros.
Si yo decidiera partir después de hoy
le diría a la nubes que se convirtieran en cuna
para arrullar mi dolor.
Le pediría al volcán que dejara caer su lava
en mi corazón para sentir su calor.
Es fácil decidir morir después de hoy
por que en vez de escuchar
a todos los árboles llorar con sus hojas secas,
los pájaros cantarían dentro de las arterias
desbordadas de mi cansado corazón.
Quisiera que cayeran gotas de lágrimas
por todo el viento ancestral del camino,
entonces me levantaré en vuelo
con los colores de las alas de las mariposas
y si luego puedo algún día regresar
de este viaje de amapolas volando bajo cielos
estrellados de misterios, no estaría triste
porque yo decidí morir después de hoy.
Anahilda Garcia