Araceli Vellber

Hace frío.

 

   Aquí, hace frío.

           Allá no lo sé.

           Esperaré el tiempo,

que tarden mis labios, en alcanzar tu boca.

Me daré la pausa,

    que las tormentas, otorgan a los pájaros,

            para retornar, a sus hojas.

            Te esperaré,

desmembrada, de ropa.

con el punto de ebullición de la sangre,

Que todavía, no la hace sólida.

Ya decides tú,

si la convertimos en estado gaseoso,

o prefieres un estado líquido,

para diluirme, entre la tormenta.

Mientras tanto,

aquí hace frio,

pero mantendré, las ventanas abiertas.