Rose Schwartz

Dedicadselo a vuestros abuelos...

¿Abuelo? ¿A dónde te fuiste abuelo?

¿Es cierto eso que por ahí se dice?

¿Alzaste el vuelo hasta alcanzar el cielo?

 

Hace muy poco mi vida rehíce

Tal y como debía acometer,

Pero la abuela al destino maldice.

 

Te quiere, desea volver a ver

Tu figura delgada y estirada,

Tan solo extraña tu perdido ser…

 

“La cama se siente tan despoblada”

Nos recuerda secándose las lágrimas

Con una voz que se escucha quebrada.

 

¿No te da pena? ¿No notas su lástima?

Tiene una herida sangrante en el pecho

Que mancha su piel longeva y pálida.

 

Claro que no, desde tu nuevo lecho

Situado sobre nuestras tristes mentes,

Más allá del cielo, ¿me ves deshecho?

 

Ahora sin ti todo es diferente,

No solo he perdido un ser al que quiero,

He perdido a mi mayor referente.

 

Por eso te escribo, siendo sincero

Sé que nunca querrías vernos tristes,

Y mucho menos en el mes de enero.

 

Pero nunca de mí te despediste,

Tuve miedo de mirar a la muerte,

Y más tarde lloré porque te fuiste.

 

Siento no poder ser un hombre fuerte,

Siento haber desobedecido el último

Deseo de quien me daba mi suerte.

 

Con lágrimas decir que fuiste único,

Que no solo digo yo, sino todos

Quienes mostraron con tus actos júbilo.

 

Aunque ahora esté a la altura del lodo,

Aunque ahora vea todo marchito,

Siempre aparecerá un mejor periodo.

 

De momento, te dedico este escrito

Con el que busco solo tu consuelo,

“Sit Tibi Terra Levis”, abuelito.