Vienes al alba
descalza y prematura,
con los ojos lavados,
pretendiendo esconderte
en la luz que te deslumbra.
Vienes hecha de silencio,
con una voz espuria,
quebrada de acentos,
ocultando tus verdades
a mis oídos atentos.
Vienes con tu pelo largo,
negro pelo hecho de vientos,
que brilla sobre la brisa
junto a los rayos del sol,
imagen imborrable del ensueño.
Vienes con tus manos
extendidas al misterio,
como queriendo sujetar el tiempo,
como queriendo otra mano
encontrar en tus empeños.
Yo me voy envolviendo,
cerrado, tras tus pasos me retengo,
me oculto en mis verdades
agrandadas en el tiempo.
Tras esa nube que parte,
...yo me voy al viento.