Hay palabras, frases,
que no deben nunca,
salir del pensamiento.
Cuando se articulan,
dejan herida de muerte.
No deben pronunciarse,
no deben escucharse,
porque quedan grabadas
más allá del consciente.
Ya nada será igual,
ya nada volverá a ser lo mismo,
porque las puñaladas tienen
cosas de maligno.
Ya, no se siente,
ya, se miente,
con todo lo consiguiente.
Se convierte en un extraño,
sacado de su vida,
borrado de su mente.
El billete es de ida,
no hay salida,
simple y llanamente.
Un corazón dolido,
es incapaz de olvidar,
lo que ya,
no podrá cicatrizar.
30/04/2015
Mauge