Como todos los días andando
En complicación, me tomo un trago
De agua para apagar mi calor.
Voy como siempre al jardín
Donde escojo con tesón,
Cada una de las flores que adornan
Mi alumbrada habitación.
Rodeado de muchos libros
Que deshojo con pasión,
Me meto en esas historias
Momentos de un escritor.
Si me pierdo en la fantasía
Amiga del soñador,
Me vuelvo a mi cordura
Con el viento que pasó.
Dejo abierta la venta
Muy cercana a mi salón,
Para que no se me olvide
Cuando es hora en mi reloj.
Como a la rosa el abrojo
Aguda en su indefensión,
Escoge con cuidado sumo
El instante de compasión.
El momento que el escriba
Salta la mesa del lord,
Que es la letra cuando nace
Con insignias de su honor.
Ya que voy terminar
Te digo amigo lector,
No es un juego es un trabajo
La vida penante del cantor.
Como no somos ni eso
Sólo reos de una cárcel,
Que se cuela en la garganta
Agrio y dulce es su sabor.