ERIKA ALOR

SENTIMIENTOS DE UNA MADRE

 

Eres el milagro que mi vientre concibió

pequeña e inocente, impávida y sonriente,

çalmas el dolor que tu llegada acaeció

me mantienes avante y con valor prudente

 

Cautivas mi vida con tu aroma fragante

y con tu ternura me convidas a amarte

me haces prudente, sigilosa y cautelosa

me impones el anhelo de ser bondadosa

 

Me invade el asombro de tu delicadeza

y asisto a tu llanto con mi poca experiencia,

noto en el aire la intriga de mi destreza

y mis brazos te alcanzan con condescendencia

 

Alcanzo a tomarte, abrazarte, y te consuelo

buscando en mi pecho el calor para calmarte,

te observo,  beso, te respiro y te siento

y exclamo a los vientos ¡bendito el arquitecto

 que hizo de tu pequeño cuerpo todo un arte

para poder sinceramente por siempre ¡amarte!