Recuerdo cuando te vi,
una tarde de verano,
y sembramos un amor,
inocente y de niños.
Con cosquillas y caricias,
Primaveras de color,
con miradas de calor,
y tu boca, una delicia.
Volveremos a la escena,
A revivir los besos,
será un día excelso,
amando tu piel morena.
Será una tarde amena,
de miradas apasionadas,
de las almas reencontradas,
y una romántica cena.