\"Ambos deberíamos estar presos,/ de nuestra libertad no ser dueños,/ yo por robarme tus besos,/ tú por robarte mis sueños\".
Yo no recuerdo haberte dado permiso
o quizá te lo di y luego no te lo retiré,
ignoro cómo esto se formó, cómo fue
que tu presencia dentro de mí se hizo.
Yo trato siempre de hacer caso omiso,
como si no supiera que adentro estás,
no acepto pensar que ahí continuarás
y no creo eso de que el destino quiso.
Entraste como una bandolera a robar,
fueron mis sentimientos todo tu botín,
sabías que en mi alma había un jardín
y mis flores como tú se iban a llamar.
Sabías que habían sueños sin despertar
y sueños despierto sólo nombrándote.
Que un cielo para ti estaba dibujándote
yo, que en mi vida, fui malo para dibujar.
Que tenía mil versos ávidos por expresar
lo que en cada poema por ti yo expreso,
hablaba del camino truncado de un beso
que algún día tus labios quería alcanzar.
Me dejaste vacío ¿adónde te lo llevaste?
Cuéntame en dónde mis cosas escondiste.
¿Por qué siento que mi amor aún existe
y se siente más desde que te lo robaste?
Bandolera, lo que tienes me lo quitaste,
ahora no me duermo sin pensar en ti
y debo callarlo, que nadie note en mí
la manera en que tú me enamoraste.
Apropiándote así, sin autorización mía
o como dije antes, tal vez sí la tuviste,
pero nunca fue amor lo que me diste
y justamente era amor lo que quería.
Poema original de Álvaro Márquez
Nacido en Caracas, Venezuela
Todos los derechos reservados
Correo: [email protected]
Twitter: @poreros
Publicado el 13/5/2015
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