Así es la vida y así va pasando,
mirando al horizonte, al infinito,
recelando y siempre filosofando,
la esencia del amor siempre buscando
y hasta a veces a dios dándole un grito.
Pensando siempre en lo que vas pensando,
vagando y lentamente caminando.
Soñando en nuestro propio chiringuito
tan cómodo, tan bien, tan calentito.
No importa lo que fuera esté ocurriendo
si es que aquello no ocurre a nuestro lado,
que la gente de hambre esté muriendo,
por las contiendas la gente sufriendo,
lo que a ellos les ocurra es su pecado.
Nosotros plácidos la tele viendo,
a la broma que nos gusta sonriendo,
a un sandwich de pena dando un bocado
y el dolor de conciencia así aplacado.
Nos fumamos la vida cual turistas,
mirando cual si fuéramos de paso,
sólo viendo lo que alcanza nuestra vista;
y aunque a veces presumimos de altruista
si ésta mira y no le gusta no hace caso.
De seres superiores presumiendo,
a sus vísceras fiel obedeciendo
y entre tanto, riqueza acumulando,
las ansias de ayudar, apaciguando.
©donaciano bueno