Elizabeth Chacon Stevens

MIRADA PERDIDA EN EL DOLOR

Martes, 12 de Mayo del 2015 a las 7:30 PM.

 

Abraza el alma entristecida, con mirada perdida

en efímero o constante silencio que lastima su herida.

Impotencia la del débil sin fortuna, el tener que sufrir,

el tener que gemir por no llorar y gemir por no morir.

Abrazan la vida mutis y de un hilo penden

sus despojos, sus infortunios que se desprenden

 

muy lastimeros. No hay carne ni sangre de junios

en corroídos huesos que tiritan en el adiós,

y con el vendaval del viento sin misericordia silban.

Abrazando el alma van para no hacer ruido en el desván

de penas, hambres que invaden en el murmullo.

Impotencia malversada; ella duerme sin arrullo

 

apaleada. Su alma me grita que soy infame, con tesura,

y me mira me incita me quema me supura

su herida como peste invasora que carcome la sutura

que no cierra en mi corazón. Me invaden

frialdades como hielos gélidos que se derriten,

que se funden, que se achicopalan. Mártires que se pierden

 

de esta vida, estrellas negras de la noche que no aman,

no mueran lentamente, que sus hijos les reclaman.

Abraza la conciencia, su presencia, que su ser te ama.

No fenezcas. Se recrudece la muerte con tu triste mirada.

Misericordia pido para el caído, amor para el adolorido, e insisto

en que tu hijo reclama tus pechos, que cuelgan con golpes imprevistos.

 

Como mareas y bombas atrevidas hay profundidades sangrantes,

y me pregunto: ¿Por qué no muere el rico en sus afanes

y dejan morir a las estrellas negras, de mil maneras?

¡Ay, cómo la justicia no es justa, ni justa es la obra del amante en balaceras,

que va robando millones de esperanzas y el pan de pobres, en festines!

¡Ay, cómo desperdician las migajas y llenan el basurero hasta sus confines!

 

Ellos abrazan el alma sin mirada, sin conciencia, sin sapiencia.

Madres e hijos mueren desarropados de su inocencia,

por unos o por todos. Soy pacífica de naturaleza en mi versar,

pero ¿A quién tenemos que acribillar o matar?

¿O simplemente hay que dilatar ese hambre que mata,

que envenena el alma de los pobres y no de la crema innata?

 

MIRADA PERDIDA EN EL DOLOR

Autora:  Rosa Elizabeth Chacón León/Stevens.

Derechos del Autor Reservados.

*  Contumazá, Perú.

*  Miami, \"Tierra Primaveral.\"

 

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