Había una mujer en la playa
yo la divisé a lo lejos
Si no hubiera sido tan viejo pensé
tal vez
le hubiera regalado un cangrejo
o un caballo
o un clavel
la flor de mis amores sacros.
Le hubiera regalado todo lo que yo soy
y lo que gracias a ella pudiera un día ser
pero ya no van a llegar
y nunca van a volver
esos amores sacros
a besar mi piel.