Un pasado del que no
te puedes desprender...
Una roca que viaja abierta
en la dirección contraria;
Ese navío que gira en sí mismo
y ningún norte lo trasnocha;
Esa miel, aun en tu piel,
que no se borra
más que con la mirada cerrada.
Un beso que se despide
torciendo su cuello...
La habitación nuestra,
tan nuestra, tan mía,
que nada me queda de ella,
más que el pasado vivo,
y calado,
como la ropa que te cubre...
contra el viento.
Un pasado del que no te puedes desprender...
Un pasado sin mi...
Pero tampoco contigo.
Un pasado que es la verdad entre guiones.
Blas Roa
Post data: -todo es mentira-
Kelly.