Carlos Alba

Fuiste

 

Solo fuiste una extraña penitencia,

una endiosada silueta en la bruma;

fuiste el anunciado adiós de la noche,

una burlesca espera amotinada.

 

 Solo fuiste un secreto revelado,

un grito liberado en débil canto;

fuiste mi oscuro manto de locura,

la amarga promesa bajo la lluvia.

 

 Solo fuiste la voz que me rodeaba,

el incierto saludo de los días;

fuiste un cálido sueño ennegrecido,

el viento que llevóse mis sentidos.