El cielo está llorando…
Se rompe la tranquilidad
que reinaba en mi estancia,
un sonido muy peculiar
me acercó a la ventana.
Golpeaban el cristal
mil lágrimas transparentes.
¡El cielo estaba llorando!.
Abrí la ventana para sentir
ese rocío en mi faz,
y una brisa húmeda y suave
envolvió las doradas hebras
de mis cabellos haciendo que
danzaran en el aire.
Entonces recordé tantas tardes
otoñales y lluviosas que compartí contigo
y sentí una tibia humedad viajar
despacito por mi faz, a la par que
me mojaba el agua del cielo.
Lágrimas de esa bóveda azul
mezcladas con las mías.
¿Lloraría el cielo al sentir
mi melancolía?
maria_dg