Si no lo sabes hoy te enterarás,
si no lo intúyes sorprenderé a tu dicha;
puedes ver mis ojos y sabrás sin que lo diga,
en una profunda mirada comprenderás.
Déjame que te lo diga con suspiros,
hoy completamente sin rodeos y desvarío;
es el instante, otro tiempo no lo veo,
las flores se abren al vernos unidos.
¡No digas nada, no digas nada!
da provecho a este mi antojo
de sentimiento que de mí mismo emana.
¡No digas nada no, pronuncies palabra!
cautelosa espera florecida lunaria
a mi expresión sincera y detallada.