No me quedan reacciones para disimular las existencia amarga de un sabor entre dientes por tener un cuerpo físico que se limita por los deseos
que no se cumplen.
tocarle, mirarle, mía de nadie,
de nadie solo de Dios.
No me quedan recuerdos de una noche sin deseos
he vivido demasiado tiempo sobre este suelo,
sobre estas rocas dibujadas con amaneceres sangrientos
sin mano que alivie esta carne perversa
del tedio que es amanecer imaginado que cae la noche
para crearla desnuda sobre mi cuerpo frío.
sal entre la boca,
oscuridad o luz que se borra.
he jugado con besos,
hecho el amor con cuanta criatura he imaginado,
sin ser más que yo mismo encarnado en otros cuerpos,
una mujer sin rostro anónima perfecta para un placer anónimo
primero le dibujo el alma y luego el rostro, completo el acto
jurando mentiras.
sal entre la boca
alma de mujer, perfume y nombres.
romanticismo que se necesita
para hacer el amor en las oscuridad,
sin recordar que se está solo.
boca
que se borra.