La duda me asalta
como la ola, rompiendo en una piedra
suspendí mis pasos
queriendo regresar
la opresión sube lenta, por el pecho
y no me decido.
En la distancia
imagino tus ojos…
los labios pronunciándome
el deseo de amar.
Y no me decido…
en el regreso de mis pasos
cada uno, rompe como olas
en tus labios…
y mis dudas.