LA VERDAD VENDRÁ
Se convertirá en sangre,
bolas de fuego se vengan.
Cuatro caballos avanzan,
huye la nieve y el jinete.
Muere el árbol y agoniza
y se levanta la muerte.
El aire se pudre, se pudre
y se expande la peste.
Las nubes no tienen agua
la lluvia desaparece,
se desintegran los cirros
y las nubes ya no vuelven.
Todas las bocas se espantan
y todas a una se tuercen…,
y la idea se derrumba
al no encontrar más sendas.
Miran a la alta estrella
y tampoco existe ella.
Avanza una luz lejana…,
la mar arrasa la tierra.
El caballo blanco salpica
la pestilencia de sombra…
Se enciende la estratosfera…
En lo lejano hay voces…,
el sonido es de trompetas.
Las bolas de fuego vuelven
y se acaban las ideas.
El llanto ya fenece…,
eh, aquí, la luz se enciende…