Alfredo Daniel Lopez

Transformado por el amor

Nuestro amor, sí nació limpio y puro

cómo nace la flor en primavera

expontánea, cálida y dulcera,

pariendo nuestra unión para el futuro.

 

Alumbrado con luz que es verdadera,

la luna blanca y bella nuestro amor

purificó, se alejó aquel dolor

naciendo así felices a otra era.

 

Con todo ello reflotan los deseos

de que ardas matorral viejo y seco

de mis penas y sueños rotos, eco

de una vida repleta de escarfeos.

Me queda superar momentos feos

que llenan esta vida, de agridulce

sabor a hiel. Que el beso ora me endulce

con tu sano cariño bien amada,

pues llegas como mágica y fiel hada

¡hoy bebo de tus labios la miel dulce!

 

 

Un beso y una flor.

Alfredo Daniel López.