Camino en la inmensidad del mundo,
me pierdo en el, me contagio en el,
Absorbo su olor, nauseabunda sociedad;
Inclemente hedor llevo conmigo,
Dolor absurdo de maldad.
Solo tu me salvas de la decadencia,
Eres mi polo a tierra, y a él me pego
cual íman, rescatando un pinche metal
Polo a tierra sos, llévame al con fin de los tiempos,
Al presente loco de esta vida mía, vacía,
Y deshecha, cansada ya de tanto vaivén
Contágiame de tu fuerza
Arrástrame sin dudar a tu presente
Permíteme seguirte a tí
No quiero perderme en los silencios
Prefiero aferrárme a tí
Dulce vida que alimenta la mía
Y después de todo, me invitas a seguir..