¡ABBA PADRE! (de mi libro “Entre Miles”)
Maravillas tras maravillas, veo
que realizas delante de mí;
Tú, que eres Dios y, aunque estás en el cielo,
a la vez te manifiestas aquí.
Me conquistaste aun antes que viniera
mi madre siquiera a darme la luz,
y dejaste clavada a la madera,
en tu carne y sangre, mi esclavitud.
Todo tu Espíritu y Poder me alcanzan:
tu paz, tu gozo, tu amor y tu fe,
más la esperanza y la misericordia,
y haciendo que en mí crezca la alabanza,
gozando de tu esencia, te diré
que: Padrecito Dios, ¡veo tu gloria!