Te perdí en el silencio
de una palabra inacabada,
te olvidé en el cansancio
de mi noche de azar.
Me volví un loco adicto
de mi musa imaginada
que olvidaba en mi delirio,
olvidaba como amar.
Aquella la noche triste,
cabalgaba en sus canciones,
tu mirándome dijiste
-¿nos volveremos a amar?-
Un rayo corto la brisa
de la nocturna velada
cuando esperabas con prisa
y yo...no dije nada.