Si en mis manos el poder yo tuviera,
siendo Rey del Mundo, te coronara;
si el poder creara Mundos,formara
muchos Mundos, y a tus pies los pusiera.
Si el Dios que llevo en mí, me concediera
del hombre la vida, la dilatara
la tuya tal, que haría que llegara
al final del Mundo, que el Mundo espera.
Si en mi corazón tuviera tu amor,
al viento de la tarde lo echaría,
sintiendo los aromas de tu aliento.
Si en mis venas entrara tu calor,
el ardiente latir trapasaría
umbrales floridos de mi ardimiento.
(salvador)