Alonzo T

Otoño nostálgico II

Madrugada, tú silenciosa,

amaneces mi mirada,

tú nostálgica,

diriges mis plegarias,

ahora te deseo

más que nunca

y brindo ese beso

que olvidaste

reclamar

 

Mañana, tú testigo

de mis deseos y sueños,

tú misma deseosa

de poseer su cabello,

guía sus ojos

a mi mirada

y su fragancia

déjala morir

en mis besos.

 

Tarde, mustia tarde,

olvidaste mi amor,

tarde, insana tarde,

en un recuerdo tu olvido reino,

ahora en sus suspiros

encuentro mi aire

y en su recuerdo

mis estrellas.

 

Noche, que dulce

me inspiras a escribir,

que en tu belleza su recuerdo

traes a la vida,

amor doloroso

siento yo,

infeliz por tu pronta partida