El Señor se distrajo derramando bendiciones
o atendiendo peticiones de todda la humanidad
y tu querube inquieto viste la oportunidad
de venir a la tierra un rato
tu me viste y te entregaste al calor de mis abrazos
mi casa no era tu casa pues eras ángel de paso
por eso vivías tranquilo, y yo con tanto miedo
de que un día Dios notara que te escapaste del cielo
Pero Él al darse cuenta que faltabas en su coro
te reclamó aquel día
y aunque yo no lo quería tú te fuiste de igual modo.