el tiempo va dando su pulsación de vida
Enredándose entre mi pasado y el presente
la calidez de la arena bajo mis pies
se cuela entre mi alma
Mostrándome el hombre que soy
Los sentimientos van enredándose
Entre mi piel y las miradas
camino bajo un cielo estrellado
anidando en mi pecho los abrazos perdidos
contemplo tu mirada de inocencia
y tu loca juventud
hoy que no te tengo hija
siento la necesidad furtiva de tus abrazos
de tu aroma bajo tu mirada
el sonido de tu voz rompiendo el silencio
Engañando las oscuras soledades
y apareces en un rincón de mis recuerdos
Acelerando al corazón
te quiero viva, te amo presente,
Te busco en cada rincón de mi diario vivir
Como abrazando lo perdido
te llevaste entre tus brazos
Aquella ternura olvidada
Sumergiéndote en los silencios
Junto a tus miradas con ese fuego
Dispuesto a encender las noches vacías
Mi pequeña niña, mi bebe
Desde tu partida dejaste al sol
Intermitente iluminando la puerta abierta
De la espera
Seguirán los días avanzar en mis manos
Sin encontrarnos aunque mi alma sigue en tu espera
Pasaran todos los días
Galopando en sus múltiples colores
y mis manos no sentirán la tibieza de tu mirada
Te seguiré esperando cada día de mi vida
Hasta poder estrecharte entre mis brazos