Quiténme lo que quieran de esta vida
que todo se me cierre y no se abra,
que me aboque la pena a la caída
pero jamás me quiten la palabra.
La palabra que nace de mi alma
manantial de mi vida y pensamiento,
a veces huracán, a veces calma
arcoíris de puro sentimiento.
Espejo claro donde se refleja
el sentir de mi esencia más profunda,
nunca consentiré que esté entre reja,
ella siempre será libre y fecunda.
Hoy les vengo a decir y no les miento:
La palabra no funde con el viento.