Miro mi entorno y me aterro,
Porque todo gira en torno a una ilusión óptica
Creada por el hombre: el dinero.
Bendito dinero calmas necesidades,
Maldito dinero compras conciencias, valores y principios,
Bendito dinero contigo soy feliz y me pierdo en el paraíso del existencialismo irreal,
Maldito dinero por tu culpa este mundo está como está,
Pues la avaricia conquisto corazones y destruyó las regiones.
Hombre, vendiste a tu familia, por unos centavos,
Cambiaste dignidad por unos cuantos pesos,
Y crees que ¿en verdad eres rico?,
Si perdiste tus valores,
Extraviaste tus sueños e ilusiones,
Te convertiste en un caníbal económico
Que solo busca saciar el ocio repentino de ser un millonario,
Un rico desadaptado
Contextualizado en una nueva dimensión,
En el que el amor es el dinero,
Tu dios es la plata,
Tú sombra, son los números de los billetes,
Y tu muerte será conseguir una y otra vez, ese maldito papel impreso.
Derechos reservados: Iván Enrique Velandia