Que difícil nos resulta el vivir
En grupos cada vez más inhumanos,
Donde ya no nos vemos como hermanos,
Todo nuestro afán sólo es competir;
Prepararnos para sobresalir
Entre muchos esfuerzos y desganos,
Tantos esfuerzos, casi sobrehumanos,
Para hallar el desgano al convivir;
Somos como esas islas separadas,
Cada uno cargando muchas penas,
Y nuestros confidentes, las almohadas,
Siempre al lado de mujeres ajenas,
Somos almas ya viejas y cansadas
Envueltas en dolores y condenas…