De rodillas te suplico no te vayas
pues no sabrí vivir sin tu amor
de rodillas te suplico no te vayas
sin ti mi vida voy a morir de dolor
Acuerdaté en aquel rincón perdido
cuando por primera vez nos besamos
tu llevabas aquel vestido rojo ceñido
a pesar de ello te acaricié con mis manos
Cuanto amor nos dimos tu y yo aquella tarde
cuantos besos se perdieron del otro en su boca
hoy siento el alma rota mi corazón me arde
pues entre las sombras mi mente se vuelve loca
Ahora me dices que te vas que quieres dejarme
que me vaya busque a otra pues vas a olvidarme
quisiera entre las sombras de la noche perderme
quisiera que viniera la muerte para a mi llevarme
Seré como el trovador que va por los pueblos cantando
canciones alegres mientras lleva la muerte en el alma
que ríe por fuera mientras está por dentro llorando
que poco a poco muere de pena pues no haya la calma