Se retuerce la idea de escribirte
con la ausencia de entenderme.
Se retuerce la idea de cantarte,
susurrarte, gemirte.
Sea aquí o allá.
De mi cuello cuelga un cascabel
y del tuyo una máquina de recuerdos.
Es así. Yo un ruido molesto
y una sonrisa no tan triste.
Tú un destello del siempre Ayer.
¿El Tiempo?
sí, se puede volver en él.
El momento se hizo arte
y los astrónomos fallaron,
no era un gigante rojo,
se equivocaron.
Eras tú y tu máquinita de recuerdos
que desde el cielo estaban
enviando unos extraterrestres mensajes.
Si fuera a entenderte
Si fuera a amarte
Si fuera un júpiter caliente
Si fuera algo más
Si sólo fuera.
Yo sería el mismo.