Donaciano Bueno

Un bobo

Escucho a Mozart por la noche y leo

a un tal Machado o a algún otro poeta,

hasta que llega el toque de corneta,

los ojos se me nublan y no veo.

 

Filtrando voy los duros de pesetas,

si algún verso me gusta, me recreo,

haciendo caso omiso a los  profetas

pues la verdad se pudre en el aseo.

 

Creo que aún estoy vivo mas no creo

en aquellos que afirman ser estetas

subiendo a los altares con mil tretas,

a convertirse en centros de deseo.

 

Huyo de los que creen ser adobo,

el centro, la comidilla en los saraos.

Yo, aquí, desnudo, detesto a esos fumaos,

sólo soy yo y mi flacidez, un bobo.

 

©donaciano bueno